16 de junio de 2011

El hombre posmoderno

Leí hace unos días en el Blog "Vivir en París" (del diario La Nación) un artículo muy interesante titulado El hombre parisino vs. el macho porteño. Lo sorpresivo del artículo es que se refiera a un tema que esa clase de blogs no abordan, ya que es más típico de otros blogs amigos debatir esas cosas. El punto es que en el posteo se habla de la forma que tienen mis congéneres parisinos para seducir, y vaya sorpresa: parece que de locales, no encaran. Me dio risa ver un análisis tan superficial sobre ese tema, pero es que nunca encuentro alguna opinión realmente convincente. Dos posibles teorías al respecto es que o bien cuidan demasiado las formas y evitan tomar decisiones, o bien la excesiva "obviedad" es visto como algo banal.

No me convence. Acá en Argentina me canso de escuchar quejas femeninas de que no nos "tiramos a la pileta", y eso que somos bien diferentes a los parisinos. Por eso mismo creo que no hay que generalizar, porque conozco varios tipos bastante rápidos los fines de semana, lo cual de todas formas no les garantiza un éxito total. Es que no hay un parámetro para medir cuestiones tan personales, tan psicológicas. Hay tendencias generales, pero siempre se verifican excepciones. Porque, siendo sincero, se ve de todo. Y lo que más veo es que el adolescente promedio actual basa gran parte de su autoestima en ser visto superficialmente por el otro. Y no sé si es peor eso o pasar totalmente desapercibido. 

Me pondría a pensar incluso si vale realmente la pena ser siempre uno quien debe tomar la iniciativa, es una responsabilidad importante y una injusta desigualdad de género, impuesta (quizás) por la naturaleza. Yo pienso que cada quien tiene lo que se merece, pero a veces el karma te trata a las patadas, eso es cierto. Hay mucha gente soltera, me decían por ahí. Obvio, sino el mundo sería terriblemente aburrido. Pero el problema problema no es la soltería, es la soledad. Esa no se la deseo a nadie. Ni a mí mismo. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario