13 de abril de 2012

Nubes

Gente Rara... Así le puse al ficticio programa de televisión que había que realizar en el instituto donde estudio periodismo. Raro me siento yo. No voy a ser esquivo en mis sentimientos. Pensaba ayer, que hace ya un par de meses que no tengo un día enteramente feliz. Siempre sucede algo dispuesto a inclinar la balanza perjudicialmente en mis días. El amor tiene su parte de culpa, para no decir totalidad. Todo hecho que me rodea, un abrazo entre una pareja, un beso, una película, todo me perjudica. Al no encontrar respuestas y en un acto evidente de la vida cotidiana, uno empieza a intentar desmenuzar que es "lo que falla en casa" para encontrar respuestas. No voy a recaer caprichosamente en la frase "Es que no se me entiende" Pero es algo parecido créame, a mi parecer hago todo para generar calidez en otra persona, no vamos a entrar en detalles, esto se ve claramente, no lo estoy inventando ya que de ser así me encontraría en esta vida absolutamente solo. A partir de allí sucede lo que ya no depende de mí, nadie a quien me acerco es capaz de dar el paso hacia adelante por mí o al menos así lo veo. Es lo bueno de ser feo, quien se fije algún día en vos, no lo hace por interés sino porque simplemente te quiere.
Otra de las cosas que me preocupa. Estoy traicionando mi moral, mis principios, si se quiere llamar así. Esta bien... Una pelea con mi papa desencadeno que me quite muchas cosas, entre esas mi computadora personal, servicio de Internet y demás lo que derivo en casi un mes y medio sin hablarnos. No estoy arrepentido de mi orgullo, al menos en ESE tema puntual. Soy conciente que mi orgullo me dio mucho pero me saco mucho en mi vida también.
¿A que voy con todo esto? En este tiempo, me excuse en que debía juntar plata para comprar una nueva computadora, alcance mis metas tras dos meses. Hoy en día tengo mi nueva computadora y estoy muy feliz con ella. A lo que voy es que me sirvió como excusa, para evitar salir, para quedarme en mi casa y a la hora por ejemplo, de salir a un boliche decir que no. Para aislarme de una realidad que me afecta, resignando mi personalidad y espíritu de fiesta, feliz que quien me conoce sabe de qué estoy hablando. Traicionarme a mi mismo. Ser conciente de ello y no hacer nada al respecto. Ese es mi problema hoy en día, tristeza que si bien no es continua, cuando llega, me hace entrar a un laberinto del cual MEDIANTE HECHOS no puedo salir.

2 comentarios:

  1. Todo llega pero a veces se hace insoportable la espera.

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  2. Un cosa es el orgullo y otra muy distinta es la DIGNIDAD. Y entiendo que la espera, como bien dice el comentario precedente, se haga insoportable. Pero nadie dijo que iba a ser fácil, porque no se le regala nada a nadie (aunque parezca lo contrario).

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